HISTORIAS DETRÁS DEL RUNNER
Rodrigo Salaberry: “El Running es mi socio para
poder ganarle todos los días a la Diabetes”
Cuando tenía 30 años comenzó a sentir sequedad en la boca y ganas de ir al baño a
orinar muy seguido. Consultó y le diagnosticaron Diabetes Tipo 1, que implica ser
dependiente de la Insulina de por vida. Esta situación si bien fue un “shock emocional”,
no le impidió seguir corriendo y no paró hasta lograr terminar su primera maratón.
Dice que “correr es vivir” y que es “su socio” para combatir a la enfermedad. Para
Danilo Salaberry, lograr pararse en la línea de largada junto a otros runners totalmente
sanos y “pasar desapercibido” es su mejor motivación para salir todos los días a
ganarle a la Diabetes.
Por Fabián Laureiro
Para mi correr es vida, es fundamental para seguir luchándola, para divertirme, y es mi
socio para enfrentar a la diabetes. Empecé a correr cuando tenía 20 años impulsado
por mi hermano, que me invitó a ir a una San Felipe y Santiago y allá arranqué sin
ningún tipo de entrenamiento previo. Recuerdo que en esa carrera puse 1 hora y
media, tuve que parar tres veces en el camino, fui un desastre, pero la terminé. Luego
entendí que había que preparar las carreras, salir a correr más seguido, siempre junto
a mi hermano.
¿Luego de esa etapa inicial como corredor, cómo te cambia la vida cuando te
diagnosticaron Diabetes?
Ahora estoy en otra etapa, porque hace 5 años me diagnosticaron Diabetes Tipo 1 y
ahí vino el shock emocional de mi vida, el gran cambio, porque pasé a depender de la
Insulina y a pincharme todos los días y eso, al comienzo, me asustó. Al principio los
doctores me dijeron que no podía hacer deporte hasta que regularizara mis valores en
la sangre.
Pero, luego de varias consultas, a los 3 meses de estar sin hacer nada, la doctora que
me atendía me dejó retomar de nuevo la práctica deportiva y a partir de ahí tomé nota
que correr iba de la mano con mi salud, porque los resultados de los estudios eran
cada vez mejores.
¿Y cómo se produjo ese proceso de cambio?
Comencé a planificar mi forma de ingerir alimentos, mi horario de salida y de llegada
de los entrenamientos y fue la mejor ayuda que tuve para combatir a la Diabetes.
Empecé a darme cuenta, que no había obstáculos si planificaba mi rutina de
entrenamientos y mi alimentación, además de poder hacerlo con más cotidianeidad.
¿Esa mejora te llevó a pensar en correr más distancias?
Seguí corriendo hasta que un día corrí mis primeros 21k en la Media Maratón de
Montevideo. Al llegar a la meta, estaba mi familia y allí me preguntaron si el próximo
objetivo sería una maratón y les dije que sí y ahí empecé a preparar la Maratón de
Punta del Este.
En mi caso salir a entrenar tanta distancia es un desafío, lo hablé con la doctora, ella
empezó a involucrarse también en la preparación de la maratón y siempre tuve
presente la planificación. Hacer fondos de 26 kilómetros no es tan fácil para mi,
porque tengo que salir con la mochilita, los alimentos, bananas, geles, etc, porque era
fundamental que no me baje tanto el azúcar en sangre. En base a cuánto corro,
determino cuánto carbohidrato ingiero, cuánta azúcar, y es un calculo que me divierte
hacer, que haya un pienso detrás de la actividad me parece interesante. Fueron 4
meses durísimos de preparación y por suerte salió todo bien.
¿Qué ibas pensando mientras corrías la maratón?
Mientras corría, hasta el kilómetro 30, solo pensaba en que no me pasara nada
externo a la carrera, yo sabía que mis piernas iban bien, pero no quería que la baja
repentina de azúcar me jugara una mala pasada. Luego de pasar el kilómetro 30,
comencé a disfrutar más de la carrera y si bien las piernas estaban cansadas, me puse
a pensar en todas las salidas que hice previo a la maratón, con frío, lluvia, luego de
trabajar varias horas, para poder estar ahí. Y ya cuando faltaban 2 kilómetros era una
emoción tan grande la que me invadió, saber que estaba tan cerca de cumplir el
objetivo, que llegué a la meta con un nudo en la garganta y ahí estaba mi familia,
esperándome.
¿Qué rol juega tu familia para que puedas correr?
El papel de mi familia es fundamental, siempre en la meta están mis padres, mis hijos y
mis hermanos, y yo trato de inculcarle a mis hijos que el deporte es salud. Quiero que
ellos sepan desde chicos que gracias al deporte su padre se puede fijar objetivos y
conseguirlos. Que sepan que cuando corro me gusta pensar en las demás personas a
las que les pasa lo mismo que a mí y decir: acá estamos, corremos como todos.
Muchas veces ni digo que soy diabético y corro al lado de personas que no sufren esta
enfermedad y está buenísimo eso de pasar desapercibido, pensar que somos iguales y
que puedo hacer lo mismo que una persona totalmente sana. Sentir eso, es otra cosa
que me motiva mucho para salir a correr todos los días.